Los Eagles de Filadelfia están nuevamente en la cima de la liga y lograron impedir que los Chiefs de Kansas City obtuvieran un tercer título consecutivo.
Jalen Hurts y compañía tomaron control del partido temprano. La defensa fue efectiva en la primera mitad del juego, logrando detener las jugadas de Patrick Mahomes y ayudando para un touchdown.
Los Chiefs lograron anotar algunos puntos, pero fue poco y muy tarde. Y los Eagles lograron una aplastante victoria, Ganando 40 a 22 y llevándose el trofeo Lombardi a casa por segunda vez en la historia de la franquicia.
Jalen Hurts ganó el título del mejor jugador del partido, tras contribuir a dos touchdowns y un último para la victoria.
Con Donald Trump convirtiéndose en el primer presidente en funciones en asistir a un Super Bowl, los Eagles superaron a Kansas City en todos los aspectos, deleitando a una multitud ruidosamente a favor de Filadelfia que celebraba cada anotación con una versión familiar de “¡Fly! ¡Eagles! ¡Fly!”.
Ni siquiera la presencia de Taylor Swift pudo ayudar a los Chiefs.
El equipo de Kansas perdió por primera vez en diez juegos esta temporada con la superestrella del pop en un palco observando a su novio Travis Kelce, quien no atrapó un pase hasta bien entrado el tercer cuarto.
Ni en las peores pesadillas de Kansas City sus aficionados podrían haber imaginado un rendimiento tan pobre como el de anoche.
Los Chiefs habían ganado tres de los últimos cinco Super Bowls, perdiendo 31-9 ante Tom Brady y los Buccaneers de Tampa Bay hace cuatro años.
Los Green Bay Packers son el único equipo de la NFL en ganar tres campeonatos seguidos, haciéndolo de 1929-31 y 1965-67.