La FIA anunció que a partir del Gran Premio de Australia, que se celebrará este fin de semana, en Albert Park, estará totalmente prohibido que el personal de las escuderías puedan subirse a los paredones del sector de la meta de llegada para celebrar, rompiendo asi una tradición en el mundo de la Fórmula 1.
La decisión llega luego de que en la última carrera, en Arabia Saudita, se haya podido visualizar al personal de los equipos Red Bull y Aston Martin subidos a lo más alto de una valla metálica que rodea el circuito urbano de Jeddah.
El comunicado establece que: “El personal del equipo sólo está autorizado en el pitlane inmediatamente antes de que se les pida que trabajen en un coche y deben retirarse tan pronto como el trabajo se haya completado”. Y continúa: “Está prohibido que el personal se suba a las vallas del pitwall en cualquier momento. Cualquier acción de un equipo que infrinja esa prohibición será denunciada a los comisarios”.
Acertado o no, lo cierto es que está nueva normativa rompe con las costumbres de festejos en la F1 al finalizar las carreras.