El centrocampista inglés del Real Madrid Jude Bellingham ha sido sancionado con dos partidos por el Comité de Disciplina de la Federación Española de Fútbol (RFEF) por una actitud de «menosprecio o desconsideración» por su comentario «fuck you» («Jódete», en inglés) vertido contra el árbitro José Luis Munuera Montero en el partido liguero del pasado sábado ante el Osasuna en el Sadar, por el que resultó expulsado con roja directa.
El órgano disciplinario ha rechazado las alegaciones del Real Madrid, en las que aseguraba que Bellingham no dijo «fuck you», sino «fuck off» (joder), al entender que el vídeo y las pruebas periciales aportadas por la entidad que dirige Florentino Pérez no aclaran que su comentario fuera distinto al recogido por Munuera Montero, según la resolución publicada por la RFEF en su web.
Bellingham fue expulsado con roja directa en el minuto 40 por el colegiado andaluz, quien recogió en el acta lo siguiente: «Por dirigirse a mí, estando a escasos metros, en los siguientes términos: ‘Fuck you'».
En su petición de que se revocase la tarjeta roja, el conjunto blanco presentó pruebas videográficas y periciales para demostrar «de manera patente» el fallo de interpretación de Munuera Montero, por lo que no debía ser considerado un insulto.
También invocó las afirmaciones que el futbolista inglés hizo tras el partido de que «no pronunció ninguna expresión de menosprecio o insulto» y que su comentario “fuck off” «no supone insulto ni menosprecio al árbitro».
Según el Real Madrid, la expulsión se adoptó «basándose en un hecho que, de haberse entendido correctamente, habría conducido a una apreciación diferente».
Para el Comité de Disciplina, «no concurre ninguno de los supuestos que permitan apreciar un error material» ni las imágenes ni las pruebas periciales aportadas por el Real Madrid «permiten llegar a la convicción inequívoca de que el jugador no pronunció la frase que le atribuye el acta, sino otra distinta».
En el caso del vídeo con el que la entidad madridista acompaña sus alegaciones, la resolución añade: «No permite apreciar el momento exacto en que el jugador pronuncia esta frase de modo completo, siendo imposible a juicio de este Comité apreciar la preposición que acompaña al verbo ‘fuck'».
«Ante esta realidad, las pruebas periciales y el propio esfuerzo de interpretación que el club realiza sobre las mismas para construir su versión de lo realmente dicho resulta sin duda muy respetable, pero insuficiente para destruir la presunción de veracidad del acta arbitral», prosigue el fallo.